“José, como era de la casa y familia de David, subió desde Nazaret, ciudad de Galilea, a la ciudad de David, llamada Belén, en Judea, para empadronarse con Maria, su esposa, que estaba encinta. Y cuando ellos se encontraban allí, le llegó la hora del parto, y dio a luz a su hijo primogénito; lo envolvió en pañales y lo recostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en la posada.”
Así de sencillo es el relato que hace San Lucas (2,4-7) del nacimiento de Jesús, un hecho que ocurre en un lugar y tiempo concretos, en Belén, siendo Cesar Augusto emperador de Roma, Quirino gobernador de Siria, y Herodes el Grande rey de los judíos, y que está seguido de consecuencias históricas definibles, pero que es mucho más que eso, porque lo que confiesa la fe cristiana es que ese recién nacido es el Hijo eterno de Dios hecho hombre.
No puedo imaginar la perspectiva de aquellos que, más jóvenes, no conocen la historia del nacimiento de Jesús sino en confusa – y mortífera, creo - mezcolanza con papá Noel, Batman, Bart Simpson o Bob Esponja, pero los que ya tenemos cierta edad y hemos nacido en un entorno socio-cultural cristiano tampoco estamos mucho mejor, porque la hemos oído tantas veces, sin detenernos a considerarla nunca, y la hemos visto representada tantas veces y de tantas formas, en pinturas, vidrieras, nacimientos o belenes, en casas, iglesias, escaparates y centros comerciales, que nos hemos “acostumbrado”, y muchas veces no somos capaces de apreciarla con toda su belleza y grandiosidad, y menos aun advertir sus implicaciones.
Y es que, aun cuando por alguna circunstancia estemos alejados de la fe y no podamos reconocer en ese relato mas que un mito (un mito inserto en la historia), si estamos libres de prejuicios y somos capaces, aunque solo sea durante unos minutos, de detener el baile (en estos días me parece ver al maestro de ceremonias dando vueltas y musitando “¡danzad, danzad malditos!”) para desembarazarnos del estrépito aturdidor que rodea la celebración de las “fiestas”, a poco que lo meditemos, no podremos dejar de reconocer que es una historia extraordinaria y sin parangón: Dios, el Creador que tiene todo en sus manos por el que todo existe y del que todos dependemos, se abaja realmente, y se pone en la situación de dependencia total propia de un recién nacido, necesitado de ayuda, de protección y de amor. Nadie podría imaginar nada semejante porque escapa a cualquier cálculo y razonamiento humanos, es la instauración de un reino de amor, no de fuerza, de un reino para los humildes que necesitan misericordia, y no para esclavos fascinados por el espectáculo de proezas deslumbrantes, que podrían forzar la inteligencia, pero no el corazón.
Tal vez por eso me gusta especialmente la escena del nacimiento en la película “Natividad ” , creo que muestra de forma maravillosa lo que significa la encarnación, el Hijo eterno de Dios hecho hombre, sí, pero no de cualquier manera, sino literalmente, hecho carne, sangre, dotado de alma racional humana, y dado a luz por una mujer, la Virgen María.
Creo que merece la pena detenerse a considerarlo unos minutos la próxima vez que veamos un Nacimiento.
¡Feliz Navidad!
29 comentarios:
¡Feliz Navidad!
¡Has quitado la aprobación de comentarios!
Hola anónimo, sí, nunca tuve habilitada esa función para aprobar o no los comentarios - si algo suscita algún debate, mejor - sino para recibir una notificación en el correo de cuando hacíais un comentario, y así poder contestar.
Pero me he dado cuenta de que hay una posibilidad, y es habilitarlo solo para las entradas más antiguas, a partir de x días, así no me pierdo si alguien comenta alguna antigua y las más modernas (he puesto 60 días), son fáciles de controlar.
Creo que así es más cómodo ¿no?
Los faraones se creían dioses, exigían se reconocimiento como tales y se procuraban, con la sangre y sudor de miles de semejantes, una tumba para proteger y perpetuar su divinidad.
En Jesús vemos lo opuesto, Dios se hace hombre, nace y crece como hombre y muere de una forma terrible, sin hacer daño a ser humano alguno, excepto el daño sentido por sus seres queridos ante su pérdida, daño reparado con la Resurrección. ¡Qué cosas!,
¡qué lección de humildad!.
Y parece que está de moda decir que la Navidad entristece, que es la peor época del año, que supone un insulto tanto consumismo ante la miseria de muchas personas. Por favor, no confundamos. La Navidad tiene un sentido religioso y, el que tiene Fé, ve en la Navidad algo bonito, alegre, es la celebración de un cumpleaños, es la rememoración de unos hechos históricos insólitos y únicos. El que vive la Navidad quiere celebrarla con el corazón limpio y con la tierna adoración de un niño y quiere compartir esa alegría con sus semejantes, multiplicando las obras de caridad, fortaleciendo la solidaridad y deseando paz por doquier. Lo otro, los convites, los regalos, las celebraciones en discotecas y los escaparates con ropa interior roja, es otra cosa, un conjunto de actuaciones como consecuencia de unas cortas vacaciones, manifestaciones de alegría colectiva desligadas del hecho religioso o actos de simpatía ante el reencuentro con amigos o familiares.
Creo que se han mezcaldo dos cosas muy distintas pero, si ello sirve para que algunos comercios puedan sobrevivir, incluso será bien visto por agnósticos y ateos ya que algo contribuirán estas fiestas a luchar contra la crisis. Imagino que será bien visto también que las personas brinden, se diviertan, canten, etc. Entonces, si es bueno para los no creyentes y es bueno para los creyentes, en lo que afecta al sentir religioso no contaminado del materialismo puro, ¿qué problema hay?. Añadiría que, los que no tienen, disponen de algo más, gracias a esa generosidad, verdadera o falsa, que parece que nos hace más sensibles hacia aquellos que más necesitan.
A los que tanto critican la Navidad, no los veo por la labor de prescindir de la cesta navideña de su empresa, ni de los días de descanso laboral que suponen el día 25 de Diciembre, el primero de año o el día de Reyes. Si se van a una casa rural a enfollonarse, a Cuba o a contemplar la Gran Muralla China, es gracias a unos días de fiesta que nos aporta el vivir en un país de tradición católica, al igual que en otros paises con otra tradición se respetan otras costumbres y fiestas, sin más polémica que aquella que unos cenutrios intelectuales quieran generar.
Posiblemente, los que atacan estas entrañables y preciosas fiestas, sean los mismos que elevan consignas contra los crucifijos o los que desearían ver derribados todas las construcciones de carácter religioso, mantenidas durante siglos y con tremendo valor arquitectónico, cultural y religioso. Si estuviéramos en Marruecos, seamos o no seguidores del Islam, lo normal es que respetáramos cuantas mezquitas y símbolos de su religión se extiendan por la geografía de dicho país. Estando en España, seamos o no religiosos, lo normal es que respetemos y cuidemos nuestro patrimonio, religioso, castrense o civil.
A todos os deseo unas felices fiestas y un próspero año 2011, si bien, por mi condición de católico, invitaría al que no lo es a acercarse a conocer a Jesús. Quizá se lleve una sorpresa y vea la Navidad desde otro prisma, con otras perspectiva. Un abrazo a todos.
José Ignacio!!!! Creo que has hecho un parón formidable dando a conocer el verdadero significado de la NAVIDAD ,porque ya está bien de tanta "NAVIDAD" vacía de sentimientos y de una ignorancia total a su base... que es el nacimiento de Jesús . Un olé por tí!!!!!!!
Manolo, creo que cuando alguien ataca la Navidad – al margen de fanáticos y esnobistas - lo hace, a veces, porque siente cierta repugnancia de los excesos y abusos que se cometen, y tiene la percepción de que debe ser otra cosa; a veces se convierte en una época complicada, porque falta un ser querido, porque se siente nostalgia de la infancia, cuando se tenían menos callos en el alma, o se está en una situación personal complicada, y parece que lleváramos un demonio dentro agitándose desesperado para evitar que podamos encontrar nada bueno a nuestro alrededor, y también hay muchas cosas buenas.
Creo que son buenas las manifestaciones de solidaridad, de alegría, las reuniones de amigos, o preparar una mesa con unas viandas especiales...., ¡es una celebración, qué caramba! Otra cosa muy distinta es elevar el foie a los altares convirtiéndolo en objeto de adoración, por muy bueno que esté, o aprovechemos la circunstancia para cometer cualquier otro tipo de abuso, con los que convertimos lo que es bueno en malo, y no solo para el cuerpo.
Creo entender, Victoria, que te ha gustado. Gracias. Solo me resta vivirla.
Me gusta la Navidad, tanto por su esencia, lo primordial, como por las manifestaciones de alegría: la iluminación que adorna las calles, los rostros llenos de felicidad de los niños, los buenos deseos cruzados entre las personas, las reuniones familiares, los Belenes, los dulces, los villancicos, los conciertos especiales, etc. Pero es por lo primero, por su sentido religioso por lo que más me gusta. Además, me resulta muy grato asistir a las misas en el tiempo de Adviento previo a la Navidad, unos preparativos sencillos y llenos de ilusión. Me gusta el contraste de vivir la Navidad en los días más fríos del año con la calidez que desprenden las calles de los pueblos y ciudades, como si se quisiera mitigar el frío a base de sonrisas y cánticos.
Pero es cierto, también es verdad que el exceso, la opulencia, el derroche o los banquetes opíparos parecen tener su caldo de cultivo en unos días en los que se debería vivir la sencillez de un pesebre, la riqueza de un nacimiento, el regocijo de la Sagrada Familia, la adoración de unos Reyes a un niño que saben que es el Hijo de Dios, la maternidad de la Virgen, Madre pura respetada, querida y protegida por un buen hombre, San José, un carpintero.
Todos los años ponemos en casa el nacimiento, pero este año ha sido especial porque nuestras hijas han acercado las figuras a la parroquia para ser bendecidas. El mismo día, se hizo una colecta de alimentos para que Cáritas aproximara y distribuyera los mismos entre nuestros hermanos más necesitados.
Falta lo que dice Nacho, vivirla. Falta la valentía de despojarnos de gran parte de la parafernalia que no nos deja ver el verdadero sentido de la Navidad.
Nadíe podia imaginar nada semejante porque escapa a cualquier calculo y razonamiento humano. Y sin embargo hay quien lo imagina, no por sí mismos, sino por el adoctrinamiento desde bien chicos,catequesis, etc.
Bob esponja, el zorro, superman, los simpson entretiene a los niños.......otros se entretienen con otras ficciones inimaginables para el razonamiento humano. y que yo sepa somos todos humanos o ¿no?
Hola anónimo.
Se trata de cuestiones distintas. Una cosa es lo inimaginable para nuestros cálculos y razonamientos humanos, entonces y ahora, (los judíos increpaban entonces a Jesús para que bajara de la cruz demostrando su poder y así creerían – estaría por ver, pero lo que sí está claro es que no por eso lo amarían- , y muchas veces, hoy, nosotros seguimos igual), al mostrar como camino de salvación el abajamiento, la humildad (que no pusilanimidad) y la entrega total de uno mismo al prójimo, por amor, y otra cosa es el conocimiento de esos hechos y del mensaje de salvación que implican, y ¿cómo nadie lo puede conocer si no se le propone y enseña? ¿por ciencia infusa?
No, el Evangelio es necesario enseñarlo para que pueda ser acogido, y si bien el conocimiento no implica necesariamente acogimiento (los demonios creen y se estremecen, dice Santiago, luego podríamos tener la plena certeza de la existencia de Dios, y rechazarlo), no es posible el acogimiento sin conocimiento, que además debe ser adecuado a la edad y capacidades de quien lo recibe.
Por otro lado, y en relación con los entretenimientos, creo que para entretenerse es mejor una buena película, un buen libro, un partido de tenis, o una partida de ajedrez, actividades todas ellas muy sanas y recomendables (entre otras muchas, claro), pero ¿entretenerse con el Evangelio, con Jesús, con la fe?....., el Evangelio no es un discurso meramente informativo, sino operativo, performativo, e implica una transformación de quien lo acoge, que no solo no tiene nada que ver, sino que es opuesta al concepto de entretenimiento.
Todos somos humanos y cada uno es libre de vivir sus ficciones y elegir sus entretenimientos. Las cuestiones de Fé y el hecho religioso nada tienen que ver con una opción lúdica más y sí que se trata de una elección libre y así se demuestra en la libre confirmación, la libre elección de contraer matrimonio religioso o la libre decisión de ofrecer una misa por los seres queridos.
Si hablamos de razón, con pura lógica San Agustín demostró la existencia de Dios. Si no se quieren aceptar sus argumentos, nada pasa, tenemos los datos objetivos de la historia que, si tampoco se quieren aceptar, nada pasa, quien quiera que se ciña a la Fé, libremente. Las catequesis suponen una breve ilustración y acercamiento a unos conceptos, a unas oraciones y sí, un adoctrinamiento elegido libremente por unos padres que optan por una educación religiosa para sus hijos. Serán éstos los que, en el ejercicio de su libertad, continuarán o no esa opción, por supuesto, libre y racionalmente.
Correcto, en ejercicio de su libertad,continuán o no esa opción, libre y racionalmente.Por eso las iglesias están faltas de gente jovén,y llenas de ancianos que por miedo a la muerte tienen que hablar con "alguien".
No seré yo quien critique la labor de la iglesia, pero las historias de sus libros pueden estar perfectamente guiadas. Unos hechos que algunas veces sucederián pero son explicables cientificamente, como las siete plagas de egipto,ocurrieron, pero también pasarón antes y despues, solo que en esa ocasión alguien da un sentido en su conveniencia(Las manda Yave para liberar al pueblo judio)
Para la alemania Nazi , los libros que lo exaltaban, eran buenos , si hubiesen ganado la guerra, todo se habria hecho para bien y el nacismo estaría bien visto porque todos formariamos parte de eso.
No quiero comparar una cosa con la otra, pero porque en ese empeño en que haya algo más despues de la muerte.Está forma parte de la vida, hay algo mejor que morirse y yasta. O tenemos que estar ETERNAMENTE,diambulando por donde?, los dias los años, los siglos, ¿eternamente? por favor, para mi y respetando a los demas yo quiero morir y punto final.
Pués ya está querido anónimo, si así consideras que va a ser, no te calientes la cabeza. Un servidor piensa de manera muy distinta, me siento feliz y quiero seguir siéndolo en esta vida y en la que considero que hay después. La opción que he elegido nada daña a los que me rodean, todo lo contrario, ya que mi condición de católico hace que mi felicidad se incremente al ver felices a los demás, siendo el mensaje de Jesús el que trato de seguir, de manera muy costosa a veces, tanto por mi débil condición humana, como por el terrible ataque del que mi religión está siendo diana.
Sí es cierto, querido anónimo, que me gustaría que algún día compartieras la misma felicidad que siento como seguidor de Jesuscristo. En cualquier caso, te pido, sea cual sea tu postura ante la vida, que procures a los demás el máximo beneficio posible, que trates de ser, en una palabra, una buena persona con tus semejantes.
Un abrazo.
Hola Anónimo, es imposible abordar con profundidad tantas y diferentes cuestiones como planteas, pero intentaré dar alguna pincelada.
1) El hecho de que una decisión sea libre no conlleva su bondad, de hecho si no fuera libre ni siquiera sería una decisión. Es cierto que no hay tantos jóvenes como nos gustaría (todos), pero no es cierto que la Iglesia se reduzca a cuatro ancianos temerosos de la muerte, y cualquiera que se acerque lo puede ver.
Yo no me atrevería a juzgar a nadie de esa manera, y creo que tu juicio se debe a que confundes la fe cristiana con lo que sería un remedo patológico de esa misma fe que, es cierto, causa aversión. Puede darse, y de hecho a veces se da, pero no puede confundirse con la misma fe. Hace poco leía la siguiente afirmación en la introducción de un libro (“Almas muertas”): que la muerte del padre de Gógol hizo que éste se apegara mucho a su madre “mujer intensamente religiosa, lo que contribuyó a la anormalidad de su carácter, casi incapaz de comunicación intelectual y afectiva con los demás…, convirtiéndose en algo casi patológico con escrúpulos y terrores maniáticos.” No conozco lo suficiente de Gógol para saber si eso es cierto o no respecto de él, pero lo que sí se es que eso no es la fe cristiana, y si alguien tiene esos síntomas se lo debe hacer mirar, porque hay algo de que anda mal.
2) Mi juicio sobre el Antiguo Testamento era más duro, hasta que supe que no cayó del cielo, ni fue elaborado de un tirón, sino que los libros que lo componen fueron elaborados a lo largo de un milenio, recogiendo una tradición oral que comienza con la etapa patriarcal en el siglo XX a.C., y que recoge la memoria de un pueblo, su historia, y las relaciones mantenidas por Dios con determinados hombres, en determinados lugares, y en circunstancias concretas. El AT está inspirado por Dios, y es verdad en cuanto historia unida a un significado salvífico puesto que enseña lo que Dios quiso consignar para la salvación, revelando progresivamente su plan que culmina con la llegada del Mesías.
3) El que los nazis perdieran la guerra es indiferente para la consideración que debe merecer su ideología. La verdad no depende de la fuerza de los cañones o del número de divisiones, como pensaban Hitler, Stalin y otros muchos, y estoy seguro de que tú rechazas también esa idea.
4) Nadie querría una eternidad como tú la planteas. Por ejemplo, Benedicto XVI en la encíclica “Spe Salvi” dice que: “Tal vez muchas personas rechazan hoy la fe simplemente porque la vida eterna no les parece algo deseable. En modo alguno quieren la vida eterna, sino la presente y, para esto, la fe en la vida eterna les parece un obstáculo…. Ciertamente se querría aplazar la muerte lo más posible. Pero vivir siempre, sin un término, sólo sería a fin de cuentas aburrido y al final insoportable….La expresión vida eterna… es por necesidad una expresión insuficiente que crea confusión. En efecto, “eterno” suscita en nosotros la idea de lo interminable, y eso nos da miedo; “vida” nos hace pensar en la vida que conocemos, que amamos y que no queremos perder, pero que a la vez es con frecuencia más fatiga que satisfacción.”
No podemos saber qué es o cómo es exactamente, pero sabemos que no puede ser eso, y que “no puede ser un continuo sucederse de días de calendario, sino como el momento de la plena satisfacción, en el cual al totalidad nos abraza y nosotros abrazamos la totalidad. Sería el momento de sumergirse en el océano del amor infinito, en el cual el tiempo – el antes y el después – ya no existe.”…., creo que quien ama o ha amado de verdad aquí en la tierra, se puede hacer una idea, aunque esté a años luz, de lo que puede significar.
Hola Manolo, una matización respecto a la relación que hay entre fe y razón. No creo que se pueda compartimentar de esa forma, razón, historia y en última instancia la fe, que sería ciega si se sigue esa secuencia.
Hay que partir de que la fe no es una idea que cada cual puede modelar a su antojo, porque está relacionada con la verdad, y dado que la razón está creada para buscar y conocer la verdad, la fe desafía nuestra inteligencia y nuestra comprensión. En esa relación de tensión vamos comprobando que todo lo que nos propone la fe, desde la idea de la creación hasta la esperanza cristiana en la salvación eterna, es una formulación inteligente que nos presenta algo razonable. La fe no es comprensible en el sentido de que pueda reducirse a una fórmula matemática, sino que se adentra en estratos cada vez más profundos, en la infinitud de Dios, pero si bien hay un límite respecto a lo que como seres limitados podemos comprender y elaborar con el intelecto, a partir de la razón existen aproximaciones que me proporcionan la certidumbre de que no es una superstición y que me permiten aceptarla como razonable.
Es en ese sentido en el que existe una adecuación entre fe y razón, y en ese sentido es por lo que una fe irracional no es una verdadera fe cristiana, y ese es un camino que dura toda nuestra vida terrena, todos los sucesos y hechos que inciden en nuestra vida provocan esa mutua interpelación, y por eso nunca se termina de profundizar en ella.
Como dice un amigo mío, la Navidad tiene los mejores interiores y la primavera los mejores exteriores. Mira que es listo, de verdad. De todas formas, la Navidad me gustaba cuando era todo por delante, nada por detrás
También la primavera, y el verano, eran distintos cuando era todo por delante, y nada por detrás, el tiempo pasaba más despacio, y era fácil dejarse llevar por los sueños en la interminable, y obligatoria, hora de la siesta veraniega...., las cosas eran menos complicadas, y hasta los tomates sabían mejor.
Tal vez - seguro - nos complicamos demasiado la existencia...., ser como niños, decíamos hace poco, pues eso....
Y como el tomate mazarronero, pocos. Y si acompañamos los mismos con un poco de hueva y mojama, con unos chatos de Barbadillo o de manzanilla La Gitana...............
La cosa es que antes los tomates no tenían que ser de Mazarrón, aunque claro, a lo mejor es hablar por hablar porque por entonces no me ocupaba de la cesta de la compra.
Ahora bien, con la hueva y la mojama, siempre con almendras, fíjate que prefiero la cerveza, un "quintico" a ser posible... parece que se pasa /trasiega mejor.
Alguien hacía alusión a que todos somos humanos. También lo son las personas mayores que acuden a misa o allí donde les plazca. Por estar las misas llenas de personas mayores, para nada merman el valor de aquellas, todo lo contrario, las hacen más interesantes. Cuando hablamos de ancianos, hablamos de nostros mismos dentro de unos años, hablamos de nuestros padres, de nuestros amigos, de seres queridos, de personas entrañables, de hombres y mujeres cuyas experiencias están bien condimentadas por los años, experiencias válidas para el que quiera analizar cualquier hecho cotidiano. Cuando hablamos de ancianos, hablamos de actualidad, son el presente, no son seres extraños. Ojalá las misas se llenen de personas maduras, relajadas, sabias, ejemplarizantes, es decir, que se llenen de ancianos, todos los que quieran, cuantos más mejor.
No obstante, la realidad es otra, las misas están repletas de personas de todas las edades y de ideologías muy diversas. Hombres y mujeres cuyas profesiones o nivel económico a nadie importan. Suelo ir a una misa a la que asisten decenas de niños y jóvenes. En el coro hay personas con edades comprendidas entre los 11 y los 85 años. En Navidad los niños y niñas llevan la voz cantante y gustan de vestirse con trajes propios de un Belén Navideño. Ahora bien, conozco una aldea en Galicia con una treintena de casas, en las que sus habitantes son personas muy mayores y casi todos van a misa. Evidentemenete, cuando acuden, el templo se llena de personas mayores, ¡no puede ser de otra forma!.
Tres mil años antes de cristo se adoraba en egipto al dios horus.... repito 3000 años, no doscientos 3000 años antes de cristo. La biblia es un calco de la vida de este dios egigcio..nacio de una virgen, murio en la cruz, al tercer dia resucit, se enfrenta al diablo en la montaña asi todo calcado. No será que los judios fueron de egigto a su tierra con la historia del dios Horus al cual solo cambiaron el nombre. 3000 años antes de cristo.
No confundamos mitología heliopolitana con historia. Egipto era una fábrica de dioses, había para todos los gustos. ¿A qué Horus te refieres?, ¿al dios mitológico?, ¿a un gobernante protodinástico del que apenas hay datos?. Creo conocer la fuente de la que has sacado los datos que aportas, querido anónimo. Te recomiendo que investigues, que leas, que te instruyas sobre Egipto si te gusta y para ello hay innumerables textos, incluso en tal número que podemos hablar de una disciplina en sí, la egipotología. También se intentó con literatura barata y con todo un follinete montado en el precioso Museo del Louvre desprestigiar todo aquello relacionado con Jesucristo.
Infórmate querido anónimo, no te creas todo lo que te digan y menos de la mano de un documental como el que, bien sabes, te ha servido de inspiración.
Egiptologos, piedras, con simbolos que significan cosas con tres mil años de antiguedad, la historia es la misma. carbono 14, ciencia , hechos. La misma logica del pueblo esclavo judio, que copian los dieses de sus amos, es muy sencillo y a la vez parece ser dificil de entender.
Hola anónimo, si tu fuente es la misma película documental que sospecho, carece de ningún rigor, y no encontrarás a a nadie serio que la avale; si no, no se dónde puedes haber obtenido esa versión que no coincide con lo que se conoce de la mitología egipcia.
En cualquier caso, te hago una consideración: si la época mosaica (huida de Egipto) está datada en torno a 1.250 a.C., y si es Isaías (7,14) el que profetiza que "la Virgen ha concebido y dará a luz un hijo... ", al final de la etapa de la Monarquía, antes del destierro de Babilonia, en el 587 a.C., ¿cómo es posible afirmar que los judíos se llevaran ese mito de Egipto en su huida -como sugieres - y tardara en aparecer, con Isaías, más de 600 años?
Además la historia del pueblo judío, desde sus inicios en la etapa patriarcal en torno al XX a.C., es la de un pueblo que lucha por preservar su identidad y rechaza sincretismos, en un proceso de purificación continua en torno al único Dios, el de de Abraham Isaac y Jacob.... no, perdona, pero que los judíos copiaran los dioses de sus amos egipcios como sugieres es sencillamente impensable.
Dicho por científicos e investigadores de la talla de Ricardo Salcedo, las pruebas del carbono 14 ni son definitivas ni fiables para demostrar que la Sábana Santa no pertenecía a Jesús. Los científicos, con datos objetivos, concluyen que las posibilidades de que no sea auténtica sean de una contra doscientos mil millones. El carbono 14 no puede ser fiable cuando el objeto de estudio ha sufrido un incendio, ha estado expuesto a polución constante, ha sido manipulado o ha sido restaurado. Cogiendo varias muestras de diferentes zonas del objeto sometido a estudio, los resultados tras las prubas con carbono 14, son muy dispares. Sí se sabe a ciencia cierta que hubo sobornos por parte de grupos organizados ateos a científicos, con el fin que expusieran su convencimiento sobre la falsedad de la Sábana Santa, si bien la verdad solamente tiene un camino y así se dispone hoy de una información amplia y veraz que permite poner luz una vez más a los datos objetivos, históricos y empíricamente demostrables. El catedrático de biología celular de la Universidad de Málaga, José Manuel Fernández Figares reconoce: ...se sabe que "surgió del cuerpo un tipo de energía que no se conoce, de muy alta intensidad, pero muy corta duración".
Especialistas en fotografía han resuelto que es imposible que las muestras, de unas dimensiones determinadas, puedan crecer en tamaño tras los análisis, en una palabra, algunos de los privilegiados que tuvieron en sus manos algo único en la historia, se rindieron al beneficio económico que les proporcionaron los grupos con especial interés en demostrar la falsedad de la Sábana Santa. Si todo es mentira, ¿por qué tanto interés en seguir arremetiendo una y otra vez contra los católicos?. ¿Qué miedo nos tienen?. Si para los no creyentes Jesús no existe y la Sábana Santa tampoco, ¿por qué no nos dejan en paz?. ¡Tanto que se gritó "no a la guerra" cuando lo de Iraq y que calladas están las mismas voces con los últimos asesinatos de cristianos mientras que rezaban tranquila y plácidamente en sus templos!
LO de la Sábana Santa es muy curioso, la ciencia forense ha demostrado hasta el tipo de látigo que se utilizó; se conoce el camino que siguió desde Jesuralén por el polen que hay en sus fibras; la datación por carbono 14 es claramente errónea por el incendio, las marcas de quemado simétricas son del plomo derretido del cofre sobre la sábana doblada; con todos los medios científicos existentes no se sabe qué es lo que produjo la impresión de la imagen, solo hay hipótesis científicas,pero lo más curioso es que la imagen es tridimensional, lo que excluye a cualquier artista, y basta con ver las técnicas de pintura que se usaban en la Edad Media. Todo un misterio sobre el que todavía se investiga.
Dicho lo cual, la Iglesia no se ha pronunciado sobre su autenticidad, aunque permite que se venere.
Dejo un enlace muy bueno, del Centro Español de Sindonología, para quienes quieran saber algo más:
www.linteum.com
Jolín! qué nivel!!!!!!
Gracias a internet puedes poner por ejemplo ¿en que se parece la vida del dios horus a la de jesucristo ?.... cuando iba por la semejanza 60 me aburri y lo dejé.No se que video decís,pero es que es la misma historia miles de años antes. ahora si decis que es mentira bueno...pues vale.
Anónimo, ya he localizado la página en la que aparece esa comparativa a que te refieres, que relaciona unas
200 similitudes.
No tiene ni pies ni cabeza.
Coge un buen libro o una buena página de mitología egipcia, y lo podrás comprobar por ti mismo.
Publicar un comentario